Esta es una imágen típica de los campos de la Quebrada de Ulloa que uno puede ver en dicho lugar. La foto grafía en sí, no es del lugar, corresponde al pastoreo de Vacunos entre plantaciones de pinos en Coyhaique, XI Región, tomada del sitio web: Red Agroforestal.Quebrada de Ulloa es una zona campesina que abarca unos 50 Kilómetros cuadrados aproximadamente, de unos 1.200 habitantes, corresponde a una zona rural que esta densamente poblada producto de la gran cantidad de parcelas que existen. Administrativamente pertenece a la comuna de Florida 8° región del Bio-Bio, pero el pueblo más cercano es Copiulemu, a sólo unos 8 Kilómetros.
En una investigación sobre las raíces de nuestra familia, tanto las ramas Ulloa, como la Martínez, necesariamente tenemos que remitirnos a este lugar y también a su historia.
Las Primeras familias que eran propietarias de tierras en Quebrada de Ulloa, no eran las de este apellido, a nuestro haber tenemos conocimiento que lo eran Familias Rocha e Hidalgo, cuya data estimada es del 1770 por estas zonas, al menos para los Rocha. De hecho aún hoy en día por los alrededores de Quebrada de Ulloa existen familias de este apellido. Una forma bastante efectiva de averiguar esto y con el apoyo irrefutable de documentación es el Archivo del conservador de Bienes Raíces de Florida. De no contar con archivos más allá del 1900, entonces estos han de estar en el conservador de bienes raíces de Concepción, ubicado en Calle Exeter.
Las Familias Ulloa y que posteriormente darán nombre al lugar son bastante recientes históricamente hablando y las hay de varias ramas del apellido. A saber, solo en mi familia hay dos linajes Ulloa y sin parentesco establecido entre sí.
Aproximadamente comienzan aparecer en los registros hasta ahora revisados y en la memoria histórica de los relatos familiares, por el 1870 apox. , o sea que poco más de 130 años de presencia en el lugar. Pero también hay un fenómeno que llama la atención y es la aparición de los siguientes apellidos en el mismo entorno y por la misma fecha. Lavín, Fariña, Yerze, Rebolledo, Martínez y Parra. Apellidos que aparecen por enlaces matrimoniales y por inmigración al lugar.
Actualmente aún existe una familia Lavín en el lugar, además de diversas familias de Apellido Ulloa, unas descienden de Eugenio de Ulloa, concretamente de Isaías Ulloa, hijo de Eugenio de Ulloa, quién llega al lugar por las fechas señaladas anteriormente. Otras ramas del apellido lo hacen de Pedro Ulloa Fuentes, quién no migro a esta zona pero sí su hijo, Fidel Ulloa Olivares. De amabas ramas soy descendiente. Los apellidos Fariña y Yerze hoy han desaparecido del lugar. Mi abuela paterna, Regina Fariña Yerze fue la última en llevar dichos apellidos y con ella desaparecieron de la Quebrada de Ulloa.
Fariña aparece por enlace matrimonial entre Julián Fariña Chávez, que venía desde Quillón (de allí era su familia ) con Guillermina Yerze Cuevas( hija de Emilio Yerze, de origen no establecido). De este matrimonio nace Regina Fariña Yerze, la madre de mi padre, mi abuela.
Los Martínez que aún existen en Quebrada de Ulloa, y de los cuales en algunos casos estoy emparentado lejanamente, descienden de Juan Fortunato Martínez( hijo de un primo de mi abuelo Teófilo Martínez Ulloa), y de Felipe Benicio Martínez por lo tanto, descendientes de Miguel Martínez Mi tatara abuelo. Los Rebolledo no se han emparentado con los Ulloa ni estos con los Lavín, a pesar de vivir muy cerca, de hecho con estos últimos mis abuelos eran colindantes. Este hecho nos revela lo reciente de su establecimiento en el lugar, ya que de malas relaciones no se puede decir nada.
La economía del lugar siempre fue la agricultura, y la posesión de la tierra siempre fue el minifundio. En el lugar no existe tradición de grandes latifundios ni de inquilinaje. Lo que allí existía eran pequeños propietarios que labraban sus tierras con sus familias. Ello se nota en muchas características hoy en día. Una de ellas es la nula existencia de los típicos relatos entre el patrón y el inquilino, tan propios de los campos de la zona central, acá inexistentes. Más bien el único predio de grandes dimensiones que se tenga noticia era el de propiedad de Bernardo Rocha, por herencia de sus padres (nombres aún no establecidos). Esta inexistencia de relaciones de patronazgos, creo muna sociedad bastante igualitaria y libre, en términos de ser reacios a trabajar para otros, si no en sus tierras, salvo la "Minga", en donde se cooperaban entre sí para las cosechas. Este dato no es menor y confirma la inexistencia de patronazgos en el lugar, al menos en las fechas que estamos señalando.
Hay un hecho en la economía del lugar y que actualmente destaca y ha dado cierta fama a Quebrada de Ulloa, la producción de loza en greda.
En mi familia no existe tradición locera, más bien esta actividad aparece en el lugar en fecha reciente, al menos nunca antes del 1870. Ninguna de mis abuela las hacía, pero ya existían relatos de gente que confeccionaba dichos utensilios. Por aquella época ha de haber sido una actividad menor, más bien marginal y como parte de la economía autárquica que predominaba en la zona. Las actividades más lucrativas eran el cultivo del trigo, la ganadería, los cereales y el vino. La zona tiene una antigua tradición vinera. La viña de mis abuelos datan de plantas que fueron cultivadas por mi tatara abuelo Bernardo Rocha. La cantidad de herramientas para la producción del vino nos hablan de un cultivo que bien podrías remostarse a épocas coloniales.
El despegue de la producción de loza esta muy en sincronía con el declive de la actividad agrícola que se gesta a partir de los años 60 y que para 1980, la agricultura pasa a una categoría marginal en la economía y sube en importancia la producción de loza en greda.
Entre el 1870 y hasta nuestros días se dio una exclusiva endogamia en los enlaces matrimoniales, es por ello que actualmente todos se apellidan Ulloa-Ulloa, Ulloa- Parra, Parra-Ulloa, Ulloa-Martínez, Martínez-Ulloa, Lavín-Martínez, Martínez-Lavín, Martínez-Parra, Parra-Martínez, Martínez-Martínez, Parra-Parra. Salvo el caso de mi abuela paterna que no pertenecía ninguno de esos linajes.
Fue la migración a la ciudad, la que se origina a partir del declive de la actividad agrícola lo que habré la Quebrada de Ulloa a nuevos enlaces con otras familias y rompe el peligro de la excesiva consanguinidad entre ellos.
Otro dato que nos señala lo reciente del establecimiento de estas familias en el lugar es que la consanguinidad no alcanzó a generar manifestaciones de degeneración genética como en otros lugares, ello nos habla de poco más de 100 años de endogamia para el lugar, por que de haber sido mayor, hoy muchos manifestarían taras producto de este fenómeno, como se ha visto en otras zonas del campo Chileno.
